Cada 31
de Mayo, la Organización Mundial de la Salud organiza el Día Mundial sin
Tabaco, una iniciativa destinada a recordar los grandes perjuicios que acarrea
el tabaco para la sociedad (no sólo para los fumadores), uno de los problemas
más graves de salud pública.
Aprovechando
esta celebración, para dedicar la entrada de hoy a el tabaco en el cine.
“Un cigarrillo lánguido al final de una muñeca caída es a Marlene
Dietrich lo
que una colilla ruda entre el índice y el pulgar era a Humphrey
Bogart: una
extensión del personaje, no un accesorio”
(Cabrera Infante en Puro Humo)
Mucho de
los iconos cinematográficos no serían lo mismo sin el humo de un cigarro.
El cigarrillo en los labios de
Bogart
El humo y los guantes de Rita Hayworth
James Dean sosteniendo por sus dientes
La boquilla alargada de Audrey
Hepburn
El tabaco perfila al personaje:
•El puro simboliza el poder.
•Un cigarrillo alargado y con
boquilla, en la boca de una mujer, sensualidad.
•En las manos de un vaquero, un
gángster o un francotirador, tensión.
•En las de un torturador, se
transforma en un instrumento de tortura.
El uso de cigarrillos por las actrices
en las películas contribuyó a normalizar su consumo entre las mujeres. Las fumadoras
eran:
• Valientes.
• Ricas.
• Independientes.
• Seguras de sí mismas.
• Casi siempre adoptaban un aire
de mujer fatal.
Películas
y Tabaco
El rey
del tabaco (1950)
La acción se sitúa entre finales del siglo XIX y principios del siglo
XX, cuando Brant Royle vuelve a la zona tabaquera más rica
de Estados Unidos dispuesto a crear su propio imperio de cigarrillos y
desafiar a un hacendado acaparador. Lo irá consiguiendo a partir de una
joven y de avances tecnológicos, e incluso se casará con la hija del magnate rival , pero acabará
comprendiendo que quien le amaba más y mejor era otra y
que la riqueza no da la felicidad.
Nicotina (2003)
Un hacker sin ningún sex appeal, Lolo, espía con webcams a su encantadora
vecina Andrea y le manipula la vida. Dos hampones, el Nene y Tomson,
discuten hasta la necedad si lo que más pesa para contraer cáncer es el
tabaco o, como en todos los órdenes de la vida, según el Nene, el simple
azar. Un ruso muy gordo, Sbóvoda, que desconfía hasta de su sombra,
tiene 20 diamantes para pagarle al Nene por un CD grabado por Lolo con
las claves de acceso secretas a un Banco Suizo. Todos están detrás de
los diamantes. Svóboda, el Nene y Tomson, por oficio. Lolo porque con su
parte piensa conquistar finalmente a Andrea y pasar del amor virtual al
de carne y hueso. Pero la llegada inesperada de un amor imposible de
Andrea que viene de España para llevársela, y la incapacidad absoluta de
Lolo para moverse por fuera de su mundo virtual complican las cosas.
Enredado en su pequeña historia personal, Lolo confunde el CD y el
encuentro nocturno con el ruso termina en una balacera de la que el Nene
y Sbóvoda salen malheridos. Y mientras
Lolo se escabulle e intenta regresar a remediar el desastre y recuperar
el control sobre la vida de su vecina, los hampones y el ruso terminan
refugiándose en una farmacia y en una peluquería del barrio. El
entrecruce azaroso interfiere las insignificantes pero no por eso menos
enredadas agendas emocionales de desamor de los personajes que ahí
encuentran. Y, en menos de dos horas, el azar y los diamantes les
terminan cambiando drásticamente la vida a todos.
Coffee
and Cigarettes (2003)
Conjunto de episodios cortos. Cada secuencia muestra a diversos
personajes sentados a una mesa, tomando café, fumando cigarrillos y
discutiendo sobre temas tan diversos como la preparación del té inglés,
las teorías sobre la conspiración contra Elvis Presley, Abbot &
Costello, la ficticia banda de rock SQÜRL, París en los años veinte o el
uso de la nicotina como insecticida...
Romance
& Cigarettes(2005)
Nick es un trabajador de la industria metalúrgica que repara puentes.
Está casado con Kitty, una modista madre de tres hijas . Nick es una
buena persona que siempre busca lo mejor para su familia, pero está
viviendo un romance con Tula.Tiene que elegir entre su mujer o su
amante.
Gracias
por fumar (2005)
El héroe de "Gracias por
fumar" es
Nick Naylor, portavoz jefe de las
grandes
tabaqueras, que se gana la vida defendiendo los derechos
de los
fumadores y los fabricantes de tabaco en la cultura
neopuritana
tan en boga hoy en día. Enfrentándose a los fanáticos de
la
salud que desean prohibir el tabaco y a un oportunista
senador que pretende poner etiquetas con la
palabra
veneno en las cajetillas de cigarrillos, Nick emprende
una
ofensiva de relaciones públicas, refutando los peligros
de los
cigarrillos en programas de televisión y contratando a
un agente
en Hollywood para que promueva el hábito de
fumar en
las películas. La nueva notoriedad de Nick llama la
atención
tanto del mandamás de la industria tabaquera como de una reportera de investigación de un influyente
diario. Nick dice que sólo está haciendo lo que debe
para pagar la hipoteca, pero la creciente conciencia de
su hijo y una amenaza de muerte muy real
podrían
obligarle a ver las cosas de forma diferente.